Recientemente compartí el siguiente extracto de un libro que estaba leyendo de Byron Katie donde decía; "Yo sigo lo que hay, lo cual siempre se me revela en el momento. Es la voluntad de Dios y siempre es clara como el cristal. Cuando careces de voluntad propia no hay tiempo ni espacio. Todo se vuelve un fluir. Tú no decides, fluyes de un suceso al siguiente, y todo se decide para ti." - Byron Katie
Entonces recibí algunos comentarios los
cuales me gustaría elaborar un poco. El primero fue:
“No siento eso Nick
siempre hay varios caminos para cada cosa. Quisiera sentirme guiada”
Por un lado ella dice que hay varios
caminos para cada cosa pero luego dice que quiere sentirse guiada. La pregunta
es, ¿cómo es posible que una persona pueda sentirse guiada si a su vez está
creyendo que tiene una voluntad personal para “elegir” entre diferentes
caminos?
Si quieres sentirte guiad@ en cada
momento todo lo que tienes que hacer es dejar a un lado la creencia de que tienes
voluntad personal para elegir entre diferentes caminos. Esa es la trampa que el
sistema de pensamientos del ego aporta, el hacernos creer que tenemos “libre
albedrío” para “elegir” diferentes caminos.
Es por eso que un curso de Milagros
claramente expone, “Tener libre albedrío no quiere decir que tú mismo puedas
establecer el plan de estudios. Significa únicamente que puedes elegir lo que
quieres aprender en cualquier momento dado.” T-In.1:4-5
Lo que se nos está diciendo es que tener
libre albedrío no quiere decir que nosotros podamos elegir caminos debido a que
el guión ya está escrito. Eso es algo que el extracto de Byron Katie apunte,
que sólo se hace la voluntad de Dios y nada más. Por lo tanto lo que esté
ocurriendo en cada momento es exactamente lo que tiene que ocurrir y no hay
nada que yo pueda hacer al respecto.
Luego la segunda oración de lo que
compartí que el curso expone es qué únicamente se puede elegir lo que se quiere
aprender en cualquier momento dado. Lo que nos dice es que dentro de lo que
está ocurriendo en cualquier momento tenemos la opción de elegir si lo vamos a
ver desde la perspectiva del ego y por consiguiente sufrir debido a que vamos
en resistencia a lo que ya está ocurriendo, o elegir el sistema de pensamientos
del Espíritu Santo y en plena aceptación estar en paz con lo que ocurre.
¿Ves que simple es la vida? Por lo tanto
lo que aparenta estar ocurriendo en mi vida es que en este momento estoy
escribiendo ésta nota y nada mas. No hay “otras opciones” que pueda yo haber
elegido porque la única opción que hay es la que está ocurriendo en este
momento. Puedo intentar convencerme de que “pude haber hecho otras cosas” y esa
es la culpa que el ego va a utilizar para machacarte cada vez que algo suceda
en tu vida y creas que hiciste lo que “no debiste” haber hecho.
Cuando termine de escribir esta nota
aparenta como que tengo “muchas opciones” para elegir. Pero la verdad es que
sólo tengo una y se revelará en el momento que esa elección tenga lugar. Y no
soy “yo” quien la elijo aunque así lo parezca. Es simplemente lo que ocurre. Y
cuando ocurra tengo la opción de estar en paz con ella, o de resistirla y por
consiguiente sufrir. ¿Elegiste “tu” ser “hombre” o “mujer”? De donde se tomó
esa elección. A eso es a lo que voy. Desde ese espacio es que se elige, y es
por eso que a este nivel personal no se absolutamente nada. Ese es el misterio.
Sin embargo podríamos entrar en un
círculo argumentativo de que si es posible o no tomar decisiones personales.
Para mí la vida es más simple que eso, “Señor que se haga tu voluntad.” Y veo Su voluntad hacerse en cada instante cuando confío en que
todo está ocurriendo perfectamente cómo tiene que ocurrir. El amor sólo se
experimenta cuando uno está bien con lo que es. Mi vida está perfecta y no hay
nada que desearía cambiar, si acaso mi manera de mirarla si algún día la
percibiese como imperfecta. Eso es paz, eso es dicha, eso es amor
incondicional.